Cómo integrar cocina y salón manteniendo a la vez la independencia de ambos espacios.
¿Te encantan las cocinas integradas con el salón, esos espacios que se convierten en el corazón del hogar, donde puedes cocinar mientras charlas con tus amigos, pero… eso de tener que mantener la cocina impecable, ya que está todo a la vista, no acaba de convencerte? ¡No te preocupes! Te damos las claves para unir ambos espacios cuando quieras y convertirlos en dos estancias independientes si lo prefieres.
HOMOGENEIDAD
La primera regla para que cocina y salón parezcan uno, no es otra que el uso del mismo suelo de modo que no haya ningún “corte” visual entre ambos.LOS COLORES ADECUADOS
Esa homogeneidad debe extenderse también a todo lo referente al colorido. Una madera clara, no acabará de casar con el estilo de tu salón. Unos muebles lacados en negro mate, sin embargo, o en color chocolate, pueden combinar a la perfección con el sofá, la mesa de comedor…
LA ISLA, PIEZA CLAVE
Una isla rotunda o una mesa contundente es siempre un elemento bisagra para unir ambos espacios. A medio camino entre zona de apoyo y mesa de comedor, será el eje que los convertirá en un único ambiente con toda naturalidad.
PANELES MÓVILES
Son la clave para romper con el hechizo y que cada estancia vuelva a su lugar. Los hay totalmente opacos pero también piezas que ocultan sin romper la amplitud del espacio, como el modelo Stripe, de Rimadesio.
